Grandes Espacios – Lunes, 7 de Noviembre de 2016
Muchos de los itinerarios comprendidos en el Programa Caminos Naturales del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente discurren por montañas total o parcialmente. Son, naturalmente, itinerarios de cierta dificultad por el desnivel que vencen y el entorno por el que avanzan. A cambio, ofrecen las mejores vistas que se pueden esperar.
En la escuela nos enseñaron que España era el tercer país más montañoso de Europa Occidental, por detrás sólo de Suiza y Austria. Y es cierto, aunque para no faltar a la verdad habría que añadir los pequeños estados de Andorra y Liechtenstein. La altitud media de nuestro territorio es de 660 metros, frente a los 340 metros de Francia o los 297 metros de media europea.
La península Ibérica está recorrida por numerosos sistemas montañosos que ocupan casi la mitad del territorio. Los Pirineos y los Sistemas Béticos son las cordilleras más elevadas y se sitúan fuera de la Meseta Central, un verdadero “castillo” en el centro de la península como la han comparado en muchas ocasiones historiadores y escritores, rodeada de murallas naturales: la cordillera Cantábrica en el norte, el sistema Ibérico en el este, y Sierra Morena en el sur. Y dentro de ella el sistema Central y los Montes de Toledo como torres del homenaje por seguir con el símil castellano…