200 kilómetros, dos países –Francia y España–, castillos, iglesias, pueblos medievales y, por supuesto, montaña.
Bienvenido al Camino de los Buenos Hombres: toda una experiencia de vida.
El Pirineo es una cadena montañosa imponente que se muestra como una barrera portentosa entre los territorios de Francia y España. Este espacio de frontera también ha sido, a lo largo de los siglos, una franja mágica dentro de las rutas de peregrinación como el Camino de Santiago. Pero hoy no hablaremos de esta ruta ancestral, sino de otra, la que siguieron los cátaros desde el sur de Francia hasta el norte de España, huyendo de la persecución a la que estaban sometidos en Occitania. Hoy en día, los caminos que trazaron aquellos «buenos hombres», como eran conocidos, forman un excepcional itinerario senderista que recorre paisajes naturales espectaculares y poblaciones históricas de gran belleza…
Los guerreros del running 